A sólo 30 kms. de Sevilla, y sobre la última cota de importancia de los Alcores, dominando la dilatada Vega del Corbónes, está la ciudad de Carmona, una de las localidades más bonitas de España y con un patrimonio vastísimo.
Índice
Carmona
Necrópolis Romana
Su descubrimiento sucede a finales del S. XIX, gracias a la iniciativa de Juan Fernández López y del arqueólogo inglés Jorge Bonsor.
La Necrópolis se data en torno al S. I. El ritual de enterramiento más frecuente era la incineración. Los cadáveres eran incinerados en quemaderos excavados en la roca donde se colocaba la pira. En ocasiones, estos quemaderos se utilizaban también como enterramiento, depositando las cenizas en la fosa, que se cubría con sillares o ladrillos. Una vez cubiertos de tierra, se colocaba una estela para indicar el lugar y el nombre del difunto:
El mausoleo colectivo, formado por una cámara subterránea, de carácter familiar, es el tipo de enterramiento más generalizado en la Necrópolis de Carmona:
Se accede a él por un pozo escalonado. La cámara suele ser cuadrangular, con un banco que recorre la parte inferior de las paredes, donde se colocan las ofrendas y sobre el que se abren los nichos. La parte externa de los enterramientos debía de estar con estelas o túmulos:
Para ocultar la tosquedad de la roca, las tumbas se decoraban. La Necrópolis es uno de los yacimientos más importantes de la Península porque conserva gran número de pinturas:
Mausoleo Circular
De planta rectangular con bóveda de cañón, es una cámara funeraria excavada en el interior de un edificio circular de sillares cuyas paredes estuvieron enlucidas. Con once nichos repartidos en cerca de seis metros cuadrados, es el único mausoleo de la necrópolis que conserva la cubierta de la cámara y parte de la estructura exterior:
Tumba del Elefante
Se trata de un santuario dedicado al culto de las divinidades de Cibeles y de Attis. La veneración de estos dioses orientales llegó a alcanzar una enorme importancia en Roma. Attis dios que moría y resucitaba cada año, arraigó entre los carmonenses, y significó la recuperación de una forma de religiosidad propia, vigente en las culturas orientales y mediterráneas:
Junto a este dios, la Diosa Madre, encarnación divina de la naturaleza, señora de la vida y de la muerte representada mediante la forma de un betilo (piedra ovoidea). No obstante, la figura del elefante ejerció desde su descubrimiento tal fascinación que llegó a convertirse en el símbolo de la eternidad más destacada de este edificio:
Tumba de Servilia
Es la más monumental de las estructuras tradicionales de la Necrópolis. Se atiene a modelos helenísticos y reproduce una lujosa mansión, con un amplio patio porticado al que se abren diferentes estancias:
Uno de estos ámbitos lo constituye la galería cubierta, en cuyo tramo central se encuentra una cámara donde parece ser que estuvo originariamente la escultura de Servilia.
En el frontal del patio porticado se halla la cámara funeraria, que tiene un gran vestíbulo, de planta trapezoidal, cubierto por bóveda apuntada.
En definitiva, todo invita a pensar que la tumba, fechada en época de Augusto, debió pertenecer a una familia de poderosos gobernantes-funcionarios romanos:
Anfiteatro Romano
Data del S. I a.C.. Sus excavaciones se iniciaron en 1885 a cargo de J. Fernández López y Jorge Bonsor.
Se supone que fue destinado a espectáculos de fieras y a otras manifestaciones artísticas y culturales. Se cree que el graderío y los vestíbulos iban cubiertos con planchas de material noble, con nichos para las consabidas estatuas de los emperadores y de los carmonenses ilustres:
Ermita de San Mateo
Situada bajo la antigua Puerta de Morón, su construcción se inició en el S. XIV. Levantada por la ciudad en agradecimiento al evangelista, en cuya festividad Carmona pasó a formar parte de la Corona de Castilla el 21 de Septiembre de 1247:
Alameda de Alfonso XIII
Comenzada en 1794, su aspecto actual no lo alcanzó hasta 1925, en fechas previas a la Exposición Iberoamericana celebrada en Sevilla en 1929.
En el arrabal se construyó una fuente, que tras su remodelación se llamó Fuente de los Leones:
Alcázar de la Puerta de Sevilla
El Alcázar se erige sobre la Puerta de Sevilla, formando así un complejo defensivo casi inexpugnable. Además, tiene una posición estratégica ya que está asentada sobre una peña de alcor y dentro del reciento amurallado, reforzando su defensa:
Posee varios elementos a destacar como la Torre del Homenaje que llega hasta la altura del patio y conserva intactos los sillares almohadillados. La Torre del Oro desde donde se puede disfrutar de una bonita panorámica de Carmona, varios salones y un Patio de los Aljibes llamado así porque en el centro del patio hay un aljibe excavado en la roca con seis lumbreras alrededor:
Alcázar del Rey Don Pedro (Parador Nacional)
Situado al oeste del recinto amurallado y en el punto más alto de Carmona. Pedro I lo hizo restaurar en el S. XIII y lo convirtió en uno de sus palacios favoritos.
Posteriormente, los Reyes Católicos embellecieron las dependencias reales. El terremoto de 1755 le afectó mucho y desde entonces la ruina ha sido progresiva.
Se accede a él por un gran (y bello) arco de herradura apuntado:
El patio de armas se encuentra defendido por tres torres:
Actualmente, las ruinas de este Alcázar rodean al Parador Nacional de Turismo:
Desde su terraza se obtiene una fabulosa vista de la Vega de Carmona, por lo que puede ser un buen momento para tomar un café en el Parador.
Iglesia de San Pedro
Se construyó en el S. XV, sobre la ermita de la Virgen de la Antigua. Posteriores reformas configuraron su actual aspecto barroco:
Destaca su cúpula barroca de gran belleza:
La construcción de la torre finalizó en 1.783 y fue coronada por el Giraldillo. La torre es conocida como la Giraldilla por su parecido con la Giralda de Sevilla:
Iglesia de Santiago
La construcción de la iglesia puede fecharse en el S. XIV, durante el reinado de Pedro I.
Posee tres portadas: la principal es del S.XVIII con bello azulejo representando la batalla de Clavijo; la de la nave del Evangelio es de piedras y de influencias bajorenacentistas y la de la epístola ojival con cuatro arquivoltas:
Iglesia de Santa María
Maximo exponente de la arquitectura religiosa carmonense. La construcción se realizó en dos fases durante los S. XV y XVI, y fue levantada sobre el solar de la antigua mezquita mayor, de la que se conserva todavía el patio de las abluciones. El templo cristiano está concebido según la estética tardogótica andaluza:
El templo presenta planta de salón, con tres naves y capillas situadas entre los contrafuertes laterales. Del periodo barroco se conservan la Puerta del Sol y la capilla Sacramental:
Iglesia del Salvador
La iglesia, de estilo mudéjar y en el testero sur de la plaza mayor, quedó arruinada como consecuencia del terremoto de Lisboa.
El edificio actual se levantó en 1.700 sobre los restos de una antigua ermita, dedicada a San Teodomiro y ocupada por los jesuitas. Destaca la torre inacabada del ángulo noreste:
Iglesia de San Bartolomé
La estructura del templo es del S. XV, aunque durante el Barroco se transformó y decoró en su totalidad. Fue en esta época cuando se concluyó la torre fachada.
La restauración de la parroquia se realizó en 1.975.
Existe una importante colección de pinturas distribuidas por los muros de la iglesia y de la sacristía. Entre ellas destaca la que representa a Santa Catalina de Alejandría:
Iglesia de San Felipe
El núcleo de construcción más antiguo data del S. XIV. La tradición fija en su solar una de las mezquitas de Carmona. Se concluyó en 1.562. Es de estilo mudéjar andaluz:
Convento de la Concepción
Fundado a principios del S.XVI. Pertenece a una comunidad de franciscanas concepcionistas. Cuenta la leyenda que fue creado bajo los auspicios de Isabel I para encubrir a un amante de Fernando «el Católico». Reformas posteriores le dan su apariencia barroca:
Convento de las Descalzas
Fundado en 1.629 de modo fraudulento y contra la voluntad del Cabildo de Carmona.
Toda la iglesia presenta una rica decoración arquitectónica propia del Barroco, que culmina en su fachada con doble portada y torre. Destaca el retablo mayor inconcluso. De especial interés es el sagrario de la sacristía realizado en madera policromada:
Convento de Santa Clara
Convento de clausura de monjas franciscanas clarisas. Fundado por Bula Pontificia en 1460 y protegido por la Duquesa de Arcos, Doña Beatriz Pacheco.
La iglesia sigue el modelo conventual sevillano, de estilo mudéjar:
Hospital de la Misericordia
Su fundación tuvo lugar en 1.510, gracias a la protección dispensada por Doña Beatriz Pacheco, duquesa de Arcos. Su función principal era cuidar y curar enfermos de forma gratuita.
Su bonita portada de ladrillo ha hecho de él uno de los edificios más característicos de esta parte de la ciudad:
Torre del Restaurante El Molino de la Romera
Antiguo molino de aceitunas de construcción árabe, del S. XV. Consta de una Torre Mirador, observatorio y atalaya, uno de los puntos mas altos de la ciudad, desde la que se disfruta de la panorámica sobre la vega de Carmona:
Casa de Don Alonso Bernal Escamilla
También llamada Palacio de los Turmo. Sobre el dintel de la puerta aparece una inscripción que recuerda la estancia en este lugar de Felipe IV y de su hermano el infante Don Carlos, al igual que las cadenas que cuelgan en la fachada en memoria de este caso , por lo que desde entonces es también conocida como Casa de las Cadenas.
La fachada encalada está presidida por una monumental portada dieciochesca de piedra con columnas toscanas:
Casa de las Descalzas (Casa de la Cultura) (Plaza de las Descalzas, s/n)
La casa se construyó en el S. XVII. La portada, enmarcada en dobles pilastras almohadilladas, termina en un balcón coronado por un frontón semicircular y adornado con pináculos:
Casa de los Aguilar (C/ Martín López, 39)
Edificio del S. XVII, que durante mucho tiempo fue sede de la casa consistorial. El cuerpo superior presenta una bonita decoración floral, que imita las hojas de acanto, mientras que en el cuerpo inferior destacan las columnas jónicas que enmarcan la puerta:
Casa del Marqués de San Martín
Palacio de estilo mudéjar comprado por don Lázaro de Briones y Mallén en 1553.
También es conocida popularmente como la «Casa de los Siete Patios«.
El escudo de armas que figura en la parte superior del dintel de la puerta principal es el que el rey Felipe II concedió a don Lázaro de Briones y Mallén, por las gestas heroicas cumplidas en la conquista de Perú:
Casa del Marqués de las Torres (C/ San Ildefonso, 1)
Es un ejemplo de la arquitectura carmonense palaciega del S.XVIII. Es un lugar céntrico de la ciudad, y actualmente se ubica en él, el Centro de Interpretación y Museo de la Ciudad:
Casa de los Lasso
Construida en el S. XVII. El único resto de su primitiva fábrica es la portada de piedra. Actualmente ha sido remodelada y se ha instalado en ella el hotel Casa de Carmona:
Casa de las Aguas
Es un edificio de carácter civil y desde el siglo pasado abastecía de agua potable a la población. Se encuentra ubicado en la parte más alta de la ciudad muy cerca de la Puerta de Córdoba y frente a la Iglesia de Santiago.
Dispone de una fachada de ladrillo y se divide en dos pisos. En la puerta de entrada tiene ornamentación barroca y la entrada es adintelada entre pilastras y un balcón corrido bajo un pequeño frontón:
Casa de los Villa
Edificio construido en el S. XVIII en el típico estilo tardobarroco local. Planta rectangular,con patio a cielo abierto en el centro del conjunto y ornamentación concentrada en la entrada. Cuerpo inferior adintelado, entre pilastras mudéjares, y balcón corrido bajo frontón en la parte superior:
Plaza de San Fernando
Está situada en la intersección del cardo y el decumano, donde se encontraba el foro romano. En el S. XVI tenía forma de rectángulo cerrado, pero, a causa de una equivocación en un proyecto de restauración, adquirió apariencia circular.
Desde los balcones se podían presenciar las celebraciones públicas, entre las que cabe destacar las corridas de toros:
Plaza de Abastos
El actual mercado de abastos es una obra de Ramón del Toro realizada en 1842 a modo de las plazas mayores castellanas con pórticos y lonjas para los puestos, de estilo neoclásico, pese a que un tramo de sus crujías correspondan al antiguo claustro conventual:
Puerta de Córdoba
Tuvo Carmona, en época romana, cuatro puertas que permitían la comunicación de la ciudad amurallada con el exterior. De ellas sólo permanecen dos: la de Sevilla y la de Córdoba.
En época de los Reyes Católicos, la puerta perdió su primigenia función defensiva y, con ello, su austero aspecto militar, tomando una función fiscalizadora de los productos elaborados fuera de las murallas. En el S. XVI se le hicieron reformas renacentistas. El aspecto barroco se le confirió en época de Carlos II. A finales del S. XVIII se realizó la última intervención, a cargo del afamado arquitecto neoclásico, natural de Carmona, José Chamorro:
Hotel Alcázar de la Reina
Durante el S. XV este edificio se utilizó como fortaleza y no son pocas las leyendas que pululan sin fin a su alrededor. Por tanto, quien se aloje en sus aposentos podrá disfrutar no solo de una agradable estancia, sino también de murales, decoración y arquitectura de la época:
Teatro Cerezo
Es el edificio más representativo en Carmona de la arquitectura de los años treinta del S. XX. Lleva el nombre de la persona que asumió todos los gastos, invirtiendo en él parte del dinero que ganó en la lotería.
En él tiene lugar el concurso de agrupaciones carnavalescas, el concurso de Carnaval más importante de Andalucía, después del de Cádiz:
Ayuntamiento
Se sitúa en el edificio que constituyó la antigua residencia conventual de los jesuitas. La obra del convento se concluyó en 1.621. La adaptación al Ayuntamiento se produjo en 1.842.
En éste se puede admirar un importante mosaico romano (Mosaico de la Medusa), encontrado en el casco antiguo: